Ofrecido por CARNICERÍA CARMELO PUCHE
La Cultural fue mejor. Dominó en las principales fases del encuentro. Supo materializar sus oportunidades. Incluidas las que no esperaba. Como las que el propio Yeclano facilitó e imposibilitó prolongar el sueño de un ascenso que por otra parte no será necesario para reconocer la inolvidable temporada de los de Sandroni. El equipo azulgrana se despide del play-off por méritos propios, con dos grandes errores de bulto que no empañarán lo más mínimo lo que los más de 23 jugadores que han vestido la camiseta yeclana a lo largo de un 2019-2020 ya de por sí tumultuoso.
La cara B de los azulgranas fue tristemente más protagonista que la cara A. Porque el Yeclano ofreció las dos durante el partido. Porque pese al primero de los regalos, los de Sandroni se rehicieron antes del descanso. Sin embargo en la segunda, la acumulación de infortunios desbarató las ilusiones y los sueños de equipo y afición.
Da igual las cábalas que cualquier analista pueda hacer sobre cómo comenzarán los encuentros. Si bien la lógica indicaba que en este play-off se impondrían los partidos pesados, miedosos y de ritmo lento ha resultado que la tónica resultó ser todo lo contrario. Y la ‘Cultu’ quiso mantener ese guion. Quiso imponer su norma durante los primeros instantes. Pichín de libre directo, que acabó en la barrera, y Castañeda con un disparo que terminó en las nubes fue lo primero que aportó en ataque.
Por su parte, el Yeclano necesitó en torno al cuarto de hora para visitar el área de Montagud. Luis Castillo pudo retener un balón en la frontal del área para la llegada de Iker Torre que se topó con demasiadas piernas. Los de Aira no obstante se mostraron como se esperaba, con criterio. Buscó la espalda de la zaga azulgrana hasta que obtuvo premio. Lo consiguió con la ayuda involuntaria de Mario Sánchez que regaló un balón corto hacia Serna que interceptó Dani Pichín para batir al cancerbero azulgrana.
Un mazazo que sin embargo se tornó el pura motivación ya que sin solución de continuidad, Mario enmendó su error convirtiendo el 1-1 apenas cuatro minutos más tarde. Un golazo de bandera en un saque de esquina que Vaquero botó raso a la frontal donde apareció como el Orient Express el ‘2’ con un trallazo al palo derecho de Montagud que no pudo hacer nada.
El Yeclano pasó entonces a ser el dueño del partido, que contuvo los desmarques leoneses a la espalda de la zaga azulgrana y supo mantener la pelota en terreno de la Cultural. Sin embargo, la primera mitad acabó con los de Aira encima de Serna por las asistencias fuera del campo a Vaquero, que se llevó un golpe sin mayores consecuencias. El Yeclano al descanso mostró su mejor versión.
Pero la hizo añicos al inicio de la segunda. En apenas seis minutos, del 46 al 51, se despidió de la eliminatoria primero con un penalti, muy discutible pero señalable de Chino, que transformó Héctor Hernández y más tarde con la repetición del error del primer tanto en un fallo de entendimiento entre Chino y Rafa López que acabó dentro de la portería por mediación de Dioni que se aprovechó del percal.
Un autocastigo del que el Yeclano intentó recuperarse aunque la situación soplaba tan a favor del norte que la Cultural no necesito asumir más riesgos que los justos y necesarios. Pero lo fue consiguiendo poco a poco. La sociedad Fenoll-Mario carburó un par de acciones que consiguió hacer creer de nuevo en el milagro.
Un milagro que no sólo no llegó sino que la herida se hizo más profunda con el cuarto y definitivo gol de Dioni tras una jugada también envenenada para la defensa del Yeclano. Los últimos quince minutos fueron un mero trámite que, repetimos una vez más, no desluce lo más mínimo el inolvidable año que los de Sandroni han acabado, hay que volver a decirlo, en una fase de ascenso a Segunda División. Que nos quiten lo ‘bailao’.