En lo deportivo fue un partido apasionante. Juvenil A y Churra esbozaron momentos de buen fútbol y dejaron entrever un duelo con interés hasta el final, pero el triste epílogo del encuentro hizo olvidar la intensidad del choque.
La batalla campal protagonizada por los visitantes se inició cuando en los minutos finales del partido el colegiado Ramírez Moreno no vio un posible penalti en el área yeclana, después de que los azulgranas anotasen el 2-2 apenas un minuto antes. Varios futbolistas del Churra recriminaron con una inusitada violencia ese posible error arbitral.
El trencillas expulsó con roja directa a Alejandro Serrano y Jorge Bartolomé. También envió al vestuario por doble amonestación a Mario Hellín. Pero los incidentes no terminaron ahí. Varios aficionados locales recriminaron a los jugadores del Churra que diesen patadas al material que se encontraba en el banquillo. Más jugadores de campo de los visitantes se dirigieron a este sector del público para golpearles.
Hasta el lugar tuvieron que acudir efectivos de Policía Local y del Cuerpo Nacional de Policía para poner fin a la disputa y evitar males mayores. El árbitro dio por finalizado el partido sin recoger estos últimos incidentes, que debían haber supuesto la expulsión de estos futbolistas y, por tanto, que los visitantes se quedasen sin el mínimo de jugadores para poder jugar.
