Su nombre es David Puche Martínez, pero tal vez deba presentarlo como ‘Chino’ para que en vuestras mentes aparezca la imagen del capitán del Yeclano Deportivo. Un jugador rápido, valiente y entregado que después de trece años en ‘La Constitución’ continúa con el mismo propósito con el que comenzó: dejarse la piel en cada partido. El que da unidad en el vestuario reconoce que el fútbol ha sido su medicina en momentos difíciles y que de momento sólo piensa en seguir haciéndonos disfrutar cada domingo.
‘La Constitución’ está vacía. Nada tiene que ver con el ambiente que se vivió durante el último partido de temporada, el pasado 15 de mayo, donde más de 3000 personas inundaron de ilusión y color estas gradas.
Miles de historias vividas brotan en el pensamiento de ‘Chino’ con el simple hecho de mirar el césped. El balón, aunque no siempre sobre hierba, es su gran pasión. Recuerda sus comienzos en fútbol cuando éste estaba integrado en las calles y lo común entre los niños era “llegar con las zapatillas rotas y llevar los pantalones con rodilleras para las caídas”. Estos recuerdos dibujan una sonrisa en su cara.
David, “señor de la casa” jugó en las categorías de cadete, alevín y juvenil del Yeclano CF. Pero cuando llegó el momento de dar el salto hacia el gran equipo, en el año 2004, éste desapareció. Nuestro capitán optó por jugar en ‘La Algueña’ (Pinoso) y estuvo una semana viajando para allá pero el campo era de tierra y la situación se le hizo muy cuesta arriba. Poco tardó en recibir la llamada de su vida. Pedro Romero, el actual Presidente del Yeclano Deportivo “me dijo que sí iba a salir un equipo y que contaba con Giorgio, Disla y conmigo pues querían a jugadores locales”. Con 18 años, David Puche vio cumplido uno de sus mayores sueños: jugar en ‘La Constitución’.
Defender el color azulgrana de su ciudad es “un orgullo” para ‘Chino’. Aunque lo importante “no es lo que sienta yo sino lo que quiero que sienta la afición cuando viene a vernos jugar”. Además, David presume de la unión y el respeto que brilla en el vestuario; valores que se ven reflejados en cada partido. La mirada del capitán revela la admiración que siente hacia sus compañeros.
Ganas, emoción, un gusanillo en el estómago y el propósito de dar todo lo posible en el terreno de juego y ayudar a sus compañeros son las sensaciones que brotan en el capitán antes de cada enfrentamiento. Y aunque cada uno de ellos fue especial a ‘Chino’ todavía le brillan los ojos al recordar el partido más bonito que vivió en ‘La Constitución’. “Fue el ascenso a Segunda División B y me tocó vivirlo como aficionado porque estaba lesionado”. Un enfrentamiento intenso y con un resultado favorable en Haro para los azulgranas. “Hubo un ambiente nunca antes visto en el estadio” pues fue necesaria la prórroga e incluso los penaltis, que el capitán decidió escuchar desde el vestuario agarrado a una Virgen, para que nuestro Yeclano Deportivo alcanzase aquel ansiado ascenso.
Las lesiones son siempre los momentos más duros que vive un futbolista. Pero no por ello dejas de ser importante para tu equipo pues hay multitud de formas de apoyar a tus compañeros. Para el partido de ascenso a Segunda División B “me junté con la afición, hicimos mosaicos e hinchamos globos”. El fútbol y, sobre todo el Yeclano Deportivo, siempre encontrará un pilar en David Puche pues es el deporte y el equipo que le ayuda a olvidar los momentos difíciles de la vida. “He tenido problemas de lesiones, familiares y emocionales y el fútbol me sirvió para evadirme de todos ellos”.
No hay expresión de tristeza en David al cuestionarle sobre el tiempo que le queda en el equipo. Será porque su cuerpo todavía siente la fiereza del primer día que tocó un balón aunque es consciente de que el fútbol tiene fecha de caducidad. “Soy una persona que siempre me he caracterizado por la rapidez e ir al cruce y creo que no sabría adaptarme a otra circunstancia”. La exigencia personal también es una peculiaridad del capitán; “será cuando pierda esas facultades el momento de replantearse el continuar o no en este deporte”. Por la forma en la que observa el césped intuyo que aún disputará muchos minutos sobre él.
LA CARA B DEL FÚTBOL
Pero no todo es idílico en el mundo del fútbol. Conciliar el trabajo y el deporte a este nivel no es una tarea fácil sobre todo a la hora de los entrenamientos. “Yo puedo jugar porque trabajo para mí, de comercial, sino me resultaría muy complicado”. Y por si este esfuerzo no es suficiente hay que añadir que los jugadores de Tercera División no están dados de alta en la Seguridad Social. David, considera que esta situación debe replantearse o al menos “tener la opción de que nos pagaran la Seguridad Social aunque lo descontaran del suelo ya que prefiero estar cotizando”.
En el deporte como en la vida cada día es diferente y de cada uno de ellos aprendes algo nuevo. ‘Chino’ asegura que ha recibido muchos consejos durante su trayectoria pero que el mejor es la experiencia que poco a poco vas adquiriendo y “estar siempre al 100% para poder salir del terreno de juego contento contigo mismo”. Su seguridad al pronunciar estas palabras hace creer ciegamente en ellas.
Tras tantos años dedicados al fútbol las anécdotas vividas son innumerables pero existe una que guarda en un lugar especial de su memoria. David jugaba en el Juvenil del Yeclano CF con Paco Polo como entrenador. “Recuerdo que ese día cambiaron la hora y aquella noche salí con dos compañeros del equipo. Estábamos en la antigua Lurios y se nos pasó la hora con tan mala suerte que vimos al hijo de Polo quien además era el segundo entrenador”. A la semana siguiente a casa de ‘Chino’ llegó una carta del Yeclano CF advirtiéndole que no se volviera a repetir y le abrieron un expediente.
A nuestra charla le quedan pocos minutos de juego y David quiere dejar claro que por encima de todo lo mejor que se lleva de este deporte son las amistades. “Gracias al fútbol tengo un amigo en cada puerto”. Su felicidad demuestra que ha merecido la pena apostarlo todo por el deporte que le da vida.
¡Gracias, capitán!