El ultrafondista Pedro Juan Zafrilla podría participar en Turín

“Mi intención en principio era terminar la prueba intentando acercarme lo más posible a los 200km., pero siempre con mucha precaución ya que nunca había realizado unas 24 horas en pista y me habían advertido de la dureza de la misma. En principio estuvimos rodando mi compañero de club Francisco Rubio y yo durante seis horas al mismo ritmo, cómodo para ambos y que trataríamos de llevar lo más lejos posible. A partir de esas seis horas él empezó a sentir molestias en el pie y aflojó el ritmo, mientras yo pude continuar al mío. Me salían unos nueve km. a la hora, un ritmo que me vino genial pues me encontré bien durante prácticamente toda la prueba y no realicé tirones en ningún momento, ni paradas largas para evitar enfriamientos. Pienso que llevar un ritmo constante pero asequible para mí fue lo que me ayudó a mantenerme en carrera hasta el final”, señala Zafrilla. “En las primeras horas muchos corredores volaban sobre la pista y ahí apenas podíamos avanzar en la clasificación. Sin embargo, a partir de las diez horas es cuando empiezas a ver progresión en puestos. Aguantan los corredores de nivel por delante, pero el que calcula mal decae”.

Como en la inmensa mayoría de los casos, primero probó con distancias más ‘populares’ antes de afianzarse en el ultrafondo: “Llevo desde el 2011 realizando pruebas de ultrafondo, pero anteriormente hice lo típico de muchos corredores, empezar con medias maratones y diversas distancias, llegar al maratón y acabar en el ultrafondo. Me encanta su filosofía y creo que es donde mejor me desenvuelvo”. Puesto a destacar alguno de sus mayores logros en la disciplina, se queda con “las dos ultratrails de la vuelta al término de Yecla, 135km., siendo segundo en marzo de este año; mi primera prueba de ultrafondo fueron los 100km. de Madrid., en 10 horas y 40 minutos”.

“Entreno por sensaciones y a razón del tiempo del que dispongo, aunque es cierto que en el mes anterior a la prueba de Barcelona llegué a acumular semanas de 200km. de entrenamiento, buscando sobre todo el ritmo que llevaría en la pista”. Una cantidad de kilómetros prácticamente impensable sin el apoyo de compañeros como Blas García y Paco Martínez, así como en general de su club: “He de agradecer a Fondistas Yecla su lucha por el bien del atletismo en general, implicándose siempre en todos los eventos atléticos posibles”. Zafrilla tampoco olvida a sus pilares básicos: “Lo principal es el apoyo de mi familia, mi mujer y mis dos hijas que me acompañan donde voy, así como mi hermano Agustín, compañero de club y que me inició en el atletismo de fondo”. Una especialidad en la que ya se ha ganado un nombre propio, pero sin perder el afán por superarse: “Disfruto con esto aunque haya que nos vea un poco locos. Por supuesto, intentaremos mejorar siempre”.